¿Tienes planeado llevar a cabo una mudanza? ¿Tienes hijos y no sabes qué hacer con ellos durante la misma, o cómo explicarles todo el proceso y lo que van a vivir? ¿Deseas saber cuál es la mejor época para realizar una mudanza con niños? No te preocupes, aquí te contaremos todo eso y mucho más gracias a nuestra experiencia de mudanzas en Barcelona y Mallorca.

¿Cómo hacer una mudanza con niños?

Lo primero que debes tener en cuenta a la hora de emprender una mudanza si tienes hijos es que estos deben comprender que van a vivir en otro lugar diferente al que, seguramente, conocen desde que nacieron.

Esto puede ser delicado, pero no tiene por qué ser traumático si lo tratamos correctamente y si los hacemos sentir parte del proyecto, involucrándolo desde el principio con información precisa o quizá permitiendo que tomen alguna pequeña decisión (como el color de su habitación u otro detalle que puedas concederle).

Por otra parte, no es razonable pensar que los niños se van a comportar de forma excelente durante todo el proceso de la mudanza: es natural que en algún momento se aburran, traten de llamar tu atención portándose mal o se resistan a ayudar en las tareas. Esas semanas debes tratar de organizarte para tener algo de tiempo para tu hijo y mentalizarte de conservar la calma para no acentúar sus «rabietas».

Por ello, sencillamente, lo más acertado para reducir el estrés es que se reduzcan al mínimo los trabajos a realizar. En un traslado con niños, no hay nada mejor que contratar los servicios de una empresa de mudanzas profesional como Mudanzas Rojals para poder dedicar a tu hijo la atención que va a requerir en estos días.

Debes saber que el tercer trimestre del año, que coincide con el verano, suele ser el mejor momento para mudarse con niños porque así no interrumpimos su periodo escolar y le ayudamos a adaptarse mejor. Podemos plantearlo como un juego para ellos y aprovechar para disfrutar más con ellos mientras los profesionales hacen el trabajo de la mudanza.

Por último, te recordamos que también tenemos servicio de trastero y de guardamuebles, con lo cual podrás dejar depositado todo aquello que no vayas a necesitar a corto plazo, como por ejemplo, la cuna que ya no usa tu hijo, los juguetes que ya quedaron desfasados para su edad y otros elementos similares. Así, con solo lo más indispensable, el proceso de ubicación en la nueva vivienda será más rápid. Una vez que estés bien asentado en el nuevo hogar ya verás si quieres conservar todos estos objetos o es mejor desharcerse de ellos.